Fue base de los movimientos urbanos y sociales

las casitasremueve los escombros tras el incendioFoto colección personal




Domingo 1º de junio de 2025, p. 25
La colonia Campamento 2 de Octubre, en la alcaldía Iztacalco, nació de uno de los primeros movimientos sociales para dotar de vivienda a familias de escasos recursos; por lo mismo, fue escenario de varias represiones policiacas. Además, allí se aglutinaron líderes y grupos campesinos y estudiantiles, por eso su nombre, con el que honran a los caídos en la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco, en 1968.
De origen lacustre, la zona era habitada principalmente por campesinos que llegaron de Puebla, Guerrero, Tlaxcala y del estado de México que buscaban una mejor calidad de vida y pagaban a terratenientes por una porción de terreno donde construyeron chozas de cartón, lámina y madera, materiales que ellos mismos llevaban por las noches.
Elvia Alicia Martínez García, de 79 años y oriunda de la zona, relata que en el lugar se sembraban alcachofas, nabos, maíz, gladiolas, nubes y amapolas, cuando ésta no se utilizaba para fabricar droga
; cuenta que los habitantes se las ingeniaban para obtener el material para construir sus viviendas.
La constante migración de los estados a la ciudad ocasionó que fuera más difícil adquirir una vivienda, ya que en su búsqueda se alojaban en las denominadas ciudades perdidas, razón por la cual en 1962 el presidente Adolfo López Mateos promovió un decreto para la expropiación de 372 hectáreas en beneficio de los colonos con el fin de construir unidades habitacionales, lo que ocasionó conflictos violentos para despojar a los habitantes de los terrenos.
Doña Elvia recuerda que para que no se los arrebataran montaban guardias con nutridos grupos día y noche y hacían rondines de 6 de la mañana a 2 de la tarde.
Ante el temor de perder su incipiente patrimonio, los pobladores buscaron apoyo de Francisco de la Cruz Velasco, don Pancho, quien rápidamente se convirtió en un referente en la lucha por la vivienda y la defensa de los derechos de los grupos marginados, considerado el primer dirigente de un movimiento urbano en el país y que era protegido por todos los residentes.
Fue así que en 1967 surgió la Unión de Colonos de Santa Cruz Iztacalco e Iztapalapa, Zona Expropiada AC, agrupación que encabezó hasta su muerte en 2016, junto con el Movimiento Urbano Popular, y que posteriormente dio paso a la organización Campamento 2 de Octubre, lo cual le costó ser perseguido, golpeado y encarcelado.
Defensa a sangre y lágrimas
En la lucha, las mujeres fueron las que dieron la cara y se enfrentaron hasta llegar a los golpes con los granaderos. Nosotras no nos dejábamos, hacíamos una valla e impedíamos el paso, por lo cual los policías nos golpeaban con sus escudos y toletes, pero aguantábamos
, rememora doña Elvia.
Debido a que desconocieron el decreto presidencial hubo varios desalojos y don Pancho fue detenido y encarcelado; sin embargo, en 1973 el tribunal colegiado del Distrito Federal le concedió un amparo y la protección federal a la agrupación, en reconocimiento a sus derechos sobre los terrenos expropiados.
No obstante, con el uso de la fuerza pública el territorio se dividió en dos partes para dar paso a la unidad habitacional Infonavit Iztacalco.
La colonia sufrió varios actos represivos. Uno de los más graves fue un incendio la madrugada del 25 de enero de 1976, provocado por grupos de choque que lanzaron bombas molotov a los techos de cartón. La conflagración dejó sin vivienda a 3 mil familias y murieron tres menores.
Tras eso los vecinos se dedicaron a limpiar y reconstruir el campamento con sus propios medios, salieron a botear e informar a la población lo ocurrido, incluso fueron colocadas lonas en las precarias viviendas en las que se leía: “Campamento 2 de Octubre, hoy 30 de enero a las 5 AM fuimos masacrados por (Daniel) Gutiérrez Santos –en ese entonces jefe de la Dirección de Policía y Tránsito del Distrito Federal– y halcones”.
Felipe de la Cruz Ménez, hijo de don Francisco, aseguró que ese terreno costó sangre; para él, más allá de lo económico tiene un valor sentimental, porque también fue un espacio cultural donde se presentó el grupo Los Nakos y se efectuaron dos encuentros latinoamericanos de teatro porque la gente que pernoctaba aquí como acto de gratitud ofrecía sus obras de manera gratuita
.
Para su hija Corina Celeste es un orgullo formar parte del legado: cuando llegaron mis abuelos aquí no tenían nada y poco a poco se hicieron de un bien
, además de los valores inculcados, ya que cuando llegábamos de alguna manifestación siempre había algo para comer para quienes apoyaban la causa
.
La colonia fue lugar de encuentro para líderes de trabajadores, campesinos, agrupaciones civiles y estudiantiles que buscaban apoyo para sus luchas; por ejemplo, los del Frente Farabundo Martí (de El Salvador) y del Sandinista de Liberación Nacional (de Nicaragua).
La colonia está entre los canales de Tezontle, de Apatlaco y La Viga, así como Francisco del Paso y Troncoso, donde aún hay colonos cuyas viviendas continúan en proceso de regularización.