Diez de los 12 colombianos detenidos en el municipio de Los Reyes, Michoacán, formaron parte de las fuerzas armadas de ese país sudamericano. Los extranjeros fueron capturados por formar parte de un grupo delictivo relacionado con el fallecimiento de ocho militares a consecuencia de la explosión de una mina terrestre, informaron autoridades federales, al dar a conocer el resultado de las acciones emprendidas en contra de grupos delictivos en el país.

“En Los Reyes, elementos del Ejército Mexicano detuvieron a 17 personas, 12 de ellas de nacionalidad extranjera, de los cuales 10 son ex militares, aseguraron siete réplicas de armas largas, cargadores, cartuchos, 41 artefactos explosivos, una caja con explosivos, una cubeta con pólvora negra, 13 placas balísticas, dos cascos balísticos, un chaleco táctico y cuatro vehículos".

Esta no es la primera ocasión en que ex militares colombianos son detenidos por autoridades mexicanas durante operativos contra organizaciones delictivas.

El 15 de mayo, un enfrentamiento de elementos de las fuerzas armadas contra miembros del cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) dejó saldo de 12 agresores muertos y tres integrantes de la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) heridos.

En ese operativo fueron detenidos nueve integrantes de una célula delictiva y al respecto el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) federal, Omar García Harfuch, informó en su cuenta X que en Huitzontla, Michoacán, en una operación fueron detenidos nueve integrantes de una célula criminal a quienes se les relaciona con homicidio, extorsión y privación ilegal de la libertad.

En esta ocasión, los detenidos la noche del jueves presuntamente forman parte del cártel Los Reyes, según fuentes de la 21 Zona Militar con sede en Morelia. Entre los 17 se encuentran 12 de nacionalidad colombiana y diez de ellos son ex militares de ese país, con conocimientos en la fabricación y manejo de explosivos.

Los capturados fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) y son investigados como presuntos responsables de la fabricación y explosión de la narcomina que causó el deceso de los militares que patrullaban en un vehículo táctico blindado SandCat un camino rural del poblado de El Santuario, en Los Reyes, donde fue detectado un centro de operación del crimen organizado.